El último golpe militar, efectuado el 24 de marzo de 1976, al que se lo denominó "Proceso de Reorganización Nacional", más conocido como "el Proceso", fue simple y llanamente hacer de la Argentina el mismo Infierno. Ninguna excusa alcanza la autoridad moral ni ética, para "legalizar" las atrocidades que se cometieron. Los militares no hicieron más que "sistematizar el horror", "institucionalizar la muerte", "doctrinar el dolor, el espanto y la crueldad", en definitiva: hacer del terror y la muerte una forma de gobierno.
Detrás de la máscara que significó derrocar a un gobierno deplorable y acabar con la subversión, se escondía la verdadera cara del mal. ¿Para qué estar pensando en diablos, demonios y un Lucifer monstruoso en un Averno subterráneo, si tuvimos a demonios mucho más verdaderos como Videla, Massera, Suárez Mason, Camps, Astiz, en un infierno vestido con los colores patrios? Es inútil y necio pensar que el mal es más que esto: secuestrar a una mujer embarazada, torturarla y violarla hasta hacerle perder el bebé o esperar a que lo tenga, arrancárselo de sus brazos y que nunca más lo vea; hacerle perder toda personalidad y vestigio de dignidad humana encerrada en la oscuridad vaya uno a saber por cuánto tiempo, para terminar matándola con un tiro en la cabeza y enterrarla o quemarla o sedarla para arrojarla desde un avión al mar.
Nadie puede decirme que estaban en "situación de guerra", ¿qué guerra es ésta, cuando un grupo de veinte hombres armados hasta los dientes, entra en una casa (luego de cortar la luz en toda la cuadra y rodearla) para secuestrar -no es otra la palabra que se puede usar- a un joven o una joven de veinte años supuestamente "guerrilleros", desquitarse violentamente con los familiares presentes, llevárselos en más de un caso sin que tuvieran nada que ver, sólo por ser "familiares del subversivo", para terminar robándose más de una pertenencia? ¿Es eso una guerra? ¿Desde las sombras e ilegalmente? Este accionar represivo desarrollado "normalmente" por los militares, es mucho más cobarde que poner una bomba. Por lo menos el que pone la bomba lo hace ilegalmente y desde la clandestinidad, pero no tiene una obligación con la legalidad como la tiene las FFAA y la Policía.
El terrorismo de Estado es la peor de las atrocidades que se pueden conocer y lamentablemente la Argentina lo experimentó en carne propia y en su más alto nivel de crueldad. Los militares levantaron este mundo de terror desde lo que llamaron Doctrina de Seguridad Nacional, mejor dicho Doctrina de la Masacre Nacional.
El nacionalismo que se desarrolló fue un nacionalismo barato y falso, mientras se exaltaba dementemente todo lo nacional se secuestraban, violaban, torturaban, fusilaban, mataban miles y miles de argentinos. ¿Acaso no estaban manchando así la tan adorada bandera argentina con sangre?. ¿Acaso ellos no eran parte de la nación? NO, para los militares no. Otra demostración de la insania de estas bestias del infierno que tuvimos por gobernantes.
Cuál fue el principal objetivo a cumplir por las FFAA con el golpe tal vez nunca se sepa, ¿derrocar una democracia decadente para "salvar" a la democracia? ¿aniquilar una subversión desaforada para "defender" el cuerpo social de la nación? ¿implantar un nuevo sistema económico propicio para los intereses del gran país del norte?. Yo lo veo como el simple hecho de que los militares necesitaban demostrar que cuando se odia se odia de verdad (haciendo ver que ellos fueron los principales cabecillas del odio y la soberbia), que ellos eran los dueños de la verdad, necesitaban demostrar lo estrecho de sus mentes, lo decadente de su ideología y la madurez de su corrupción en cuanto al origen que les dió vida. Los militares no hicieron más que condenarse a sí mismos, lamentablemente a costa de miles y miles de argentinos.
¿Cuál es el legado que nos dejaron los siete años de dictadura? A saber:
1- un país herido en lo más profundo de su ser
2- un país desangrado internamente
3- 30.000 desaparecidos
4- miles y miles de muertos combatiendo en la lucha armada
5- una cultura destrozada por el odio y el fanatismo (ej: Operación Claridad)
6- generaciones marcadas con sangre
7- una educación aplastada por la soberbia y el silencio
8- la desconfianza y el desprecio para con las FFAA y la Policía (ya que la ideología fascista y asesina, se sigue implantando con las represiones descontroladas a trabajadores y estudiantes, su declarado e inocultable odio a <
9- miles de familias destrozadas por la desaparición de uno o más de sus miembros (considerando también las familias enteras que desaparecieron)
10- cientos de niños en poder de padres ajenos o de los mismos captores y torturadores de sus verdaderos padres
11- la idea de que la libertad del pueblo tiene que estar supeditada al fanatismo y al odio de las armas
12- la idea de que seguir los ideales es en vano
13- Las Madres de Plaza de Mayo
14- Las Abuelas de Plaza de Mayo
15- Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas
16- H.I.J.O.S.
17- 712 adolescentes y jóvenes muertos combatiendo en las Malvinas
18- miles de ex combatientes sufriendo las penurias por ser Héroes Nacionales
19- cientos de ex combatientes presos o muertos luego de ser rechazados por una sociedad enferma a causa de los militares
20- casi 9.000 presos políticos luego de ser detenidos-desaparecidos, o sea: torturados
21- miles de exiliados
22- un sistema económico a favor de los ricos y en contra de los pobres, o sea: a mercer de los intereses de EEUU
23- la idea de que la impunidad es una vecina cotidiana (Obediencia Debida, Punto Final y el ultraje a la memoria de los muertos, a la justicia y al dolor de un pueblo como fue el Indulto)
24- la marca de la MASACRE NACIONAL como el pecado original pero solamente para los argentinos
25- la idea de que luchar por una buena causa es en vano
26- la idea de que el silencio y la indiferencia es lo mejor (ej: "si yo no me meto no me va a pasar nada", "algo habrá hecho" o "por algo será")
Con el golpe del 76' las FFAA mostraron su verdadera cara, la cara del odio, de la soberbia, de la crueldad desaforada; el rostro del nazifascismo que adoptó luego de la Segunda Guerra Mundial y el primer gobierno de Perón, alejándose de la concepción original que les dió vida: el espíritu sanmartiniano.
El término golpe nunca fue mejor usado, el Proceso fue un golpe sanguinario al corazón de la Argentina. Lo que realmente me duele es que este golpe fue avalado por varios sectores sociales del país: la oligarquía económica y financiera que veía sus intereses asegurados con un gobierno militar al servicio del capitalismo-imperialismo, más de un partido político que veía con buenos ojos que se acabara con lo que quedaba del gobierno peronista y con los restos dispersos y desesperados de los grupos guerrilleros peronistas o no, la Iglesia que siempre estará acomodada con los poderosos y con los que mandan, y finalmente una parte de esta sociedad enferma que en esa época creyó que con la <
Me cuesta creer que un nuevo golpe de Estado se puede producir en la Argentina, sería un síntoma de que nuestra sociedad ya no sólo es inmadura sino que es estúpida. Después de lo que fue el último golpe, el pueblo argentino no se puede dar el "lujo" de dejarse pisotear nuevamente por los militares. Los problemas del país los tiene que arreglar el pueblo argentino, no una "élite superior" como se creían -y lamentablemnte se siguen creyendo- los militares.
Una sola bandera se tiene que levantar ahora, no importa ideologías o partidos políticos, no importa que se sea nacionalista o patriota, revolucionario o liberal, una bandera que tiene que levantar el pueblo argentino solamente por ser argentino, una sola bandera: la del NUNCA MAS.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario